que las imágenes están igual de frescas que hace un año
cuando apenas las estabas fotografiando en mi memoria
cuando pasabas tu mano sobre mi piel.
Que las mariposas me recuerdan tu vuelo,
que veo hoy como se alejan para regresar en invierno
y mis inviernos se prolongan mientras te sigo esperando
y no permito que se empolve tu recuerdo.
Que el andar melancólico lo guardo y mantengo
no por tenerte presente, me lo quedo
y nombro como mio,
para que a tu vuelta sepa diferenciar el ser feliz, de esto.
Y seguiré sosteniendo tu mano mientras quedas dormida
dentro de mi recuerdo, mientras acaricio tu pelo en la soltura del viento,
por que cuando despierte de este sueño
quiero tenerte presente no solo por un momento.
No se si volveré a verte, o encontrarme con tu alma en sueños,
solo quiero que sepas todo lo que dejaste guardado
dentro de aquella mochila con la que viajaríamos,
dentro de los cajones para los recuerdos.
Dentro de lo que alguna vez fui,
todo lo que quise para ti
y que hoy voy a lavar en la primer lluvia
para que tu recuerdo no duela con ella.
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